El desalojo, el otro drama de la Zona Cero de Nueva York




Como para celebrar: Después de 7 años del acto terrorista que sacudió el mundo, el artículo que se escoge y se suma a este blog en su entrada No. 64 de hoy 10 de septiembre de 2008, cercanos a la cruel efemérides del 11 de septiembre... que llegará, se comerá los ojos desde la pantalla chica que nos transformó en Aldea Global; porque todos aquellos que sobrevivieron, hoy están intervenidos por el gran capital que quiere recuperar su símbolo enhiesto; levantado como gran músculo del viejo imperialismo sistema económico que hoy se renueva mandando a la calle a los que no quisieron irse, los vecinos habitantes a la Zona Cero quienes se aferraron al predio... Como homenaje póstumo a los que murieron, no os perdais este video que muestra desde la perspectiva de Europa los fines y consecuencias del atentado y denuncia a los factores del mal para quienes el atentado fue la excusa perfecta para convertir al mundo en una pesadilla sin término llamada "Capitalismo de choque", como lo ha analizado muy bien Naomi Klein.

Una corresponsal Newyorquina nos muestra otra consecuencia de la recuperación de la zona cero y las consecuencias que trae a quien se aferra con amor a una tierra de viejas utopias: New York.






Olga Imbaquingo. Corresponsal en Nueva York

El dinero manda a la hora de volver a dar forma y levantar la construcción de la Zona Cero, donde hasta la mañana del 11 de septiembre del 2001 se levantaban las desaparecidas Torres Gemelas.

Una intrincada batalla con muchos actores y alejada del anhelo inicial de rendir un homenaje a los muertos y a la libertad es lo que ha hecho rediseñar el proyecto incontables veces. Mientras tanto, alrededor de esa zona es evidente otra realidad.

Los entretelones
Según la moradora Mercedes Esquerete, “en el condominio donde vivo hace 30 años hay decenas de departamentos vacío, los negocios pequeños han sido desplazados, se cerró el club de los muchachos y el edificio no se volverá a abrir, el parque de enfrente ya está privatizado.
Barack Obama y John Mccain, candidatos presidenciales, estarán mañana en Nueva York para acudir a la ceremonia por al séptimo aniversario del atentado contra el World Trade Center.
Este año, la lista de 2 750 personas muertas será leída por estudiantes extranjeros de 91 países, que representan al número de nacionalidades que perdieron la vida aquel día, hace siete años.
Al principio la psicosis hizo que muchas empresas de Wall Street y propietarios de departamentos se fueran de la zona. Eso, sin embargo, ya es historia porque ahora nadie habla de miedo ni se tiene la intención de irse del lugar.

“Todos querían irse. Igual yo. La ciudad nos ofreció USD 3 000 para retenernos, yo tome ese dinero y me quedé, pero ahora nos ofrecen USD 300 para que nos vayamos porque quieren construir complejos solo para millonarios”, dice Wuilda Vera.

Ella es una residente puertorriqueña que vive alrededor de 20 años en Rutgers House Condominium. Desde las ventanas de su estudio vio cómo se desplomaban las torres. Lo cuenta como si eso hubiera ocurrido ayer. Todavía sueña con eso, pero esa pesadilla ya ha sido reemplazada por otra: el miedo a ser desplazada del lugar donde vive.

“Esto se ha convertido en una terrible consecuencia de los atentados”, dice Stanley Mark, representante legal del Fondo Asiático-Americano de Educación, para quien “la reubicación es una realidad y los más afectados son quienes no pueden pagar rentas altas.

Según su opinión, el bajo Manhattan no solo es una zona de ricos. “Aquí viven muchos pobres, sobre todo chinos y latinos, quienes probablemente serán empujados a abandonar estos barrios para dar paso a edificios de oficinas, hoteles y condominios de lujo. Esa es la psicosis de ahora, además de la salud y el desempleo”.

En el momento, por ejemplo, hay 33 hoteles de lujo, unos listos y otros en proceso de construcción. “La inversión en el sur de la zona en la industria de hotelería que se ha convertido en la más dinámica y de deseable ubicación”, dijo a la prensa Eric Deutsch, presidente de Alliance for Downtown New York.

La propuesta de rezonificación ya existe e incluye a 111 bloques que abarcan Chinatown y el bajo Manhattan y el plan será aprobado en cuatro meses. De allí el temor de los vecinos, quienes reclaman que nadie los tomó en cuenta para el diseño del proyecto, en una zona donde el metro cuadrado de construcción está en un promedio de USD 20 000.

Edith Hsu-Chen, comisionada de Planificación de la ciudad, no acepta estas críticas y asegura que todo el mundo fue invitado para que dé sus puntos y haga aportes.

“Chinatown y el bajo Manhattan no están en venta”, dicen los ciudadanos, pero tienen la sensación de que pudieran perder la batalla, debido a las altas inversiones que se hacen en la zona: “Obama y McCain, nosotros también existimos”, dicen los moradores.

“Es el plan racista del Alcalde, que quiere sacar a la gente negra”, dice Adolfo López, uno de los organizadores de la comunidad. “La mejor estrategia que se han inventado es tratar de dividirnos a los latinos y a los chinos, pero los dos grupos ya estamos trabajando juntos y tenemos más de 10 000 firmas de vecinos de la zona que se oponen a la reubicación”.

“El capital está corriendo a pasos agigantados y cuando nos despertemos ya estaremos en la calle”, agrega Wuilda Vera.

Los entretelones
Según la moradora Mercedes Esquerete, “en el condominio donde vivo hace 30 años hay decenas de departamentos vacíos, los negocios pequeños han sido desplazados, se cerró el club de los muchachos y el edificio no se volverá a abrir, el parque de enfrente ya está privatizado.
Barack Obama y John Mccain, candidatos presidenciales, estarán mañana en Nueva York para acudir a la ceremonia por al séptimo aniversario del atentado contra el World Trade Center.
Este año, la lista de 2 750 personas muertas será leída por estudiantes extranjeros de 91 países, que representan al número de nacionalidades que perdieron la vida aquel día, hace siete años.


EL AVANCE DEL NEOTOTALITARISMO POST GUERRA FRIA Y POST 9/11-2001

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